CRISIS DEL SISTEMA DE SERVICIO SOCIAL
En las últimas semanas, hemos tenido constancia de las movilizaciones que se están realizando en algunas comunidades autónomas, siendo la manifestación de una valoración cada vez más generalizada en todos los territorios, la reivindicación de reclamar un sistema de protección social, en su parte de atención primaria, más justo e igualitario para todos los ciudadanos, dibujando el actual sistema como una red que ha degenerado y desvirtuado sus propios objetivos, poniendo el acento en las fragantes desigualdades en el acceso, intensidad, contenido y disparidad de financiación frente a sus destinatarios. Por lo que ese sistema, que paradójicamente se diseña pensando entre sus objetivos más generales como un motor para ajustar las desigualdades sociales, acaba siendo un elemento que en su propia estructura genera desigualdades, es por ello, que desde este colegio profesional se viene reclamando desde hace décadas al abandono de las fórmulas que dieron forma al sistema tal y como lo conocemos en la actualidad.
Denunciamos desde hace tiempo las injusticias que encierra, la precariedad de la que se reviste y la necesidad de formalizar una nueva organización más eficaz y útil para el fin que se le presupone y que lo define.